Manchester United mantuvo la puja por acceso a Champions tras vencer al Brentford

Manchester United mantuvo la puja por acceso a Champions tras vencer al Brentford

Cristiano Ronaldo. EFE/EPA/PETER POWELL

 

 

Aunque la Liga de Campeones es una misión ya aparentemente imposible, cinco puntos por debajo del Arsenal, con dos partidos menos, el Manchester United aún no desiste, porque tampoco se lo permite su actual posición en la tabla, sexto, con la plaza de la Liga Europa aún por asegurar, pero más cerca con el 3-0 al Brentford transformado por Bruno Fernandes, Cristiano Ronaldo y Raphael Varane.





Un triunfo práctico, sin matices, que rearma al United, ganador nada más de tres de sus diez encuentros más recientes en la ‘Premier’, a falta de dos partidos más para terminar una temporada que no le deja nada satisfecho (no puede estarlo si el consuelo es la Liga Europa), pero una victoria necesaria para honrar a algunos futbolistas en su despedida de Old Trafford. Quizá a Edinson Cavani, que reapareció después de un mes de baja por lesión (jugó el último cuarto de hora tras entrar por Elanga), Juan Mata, Nemanja Matic…

¿Y Cristiano Ronaldo?

La llegada de Ten Haag y su propia opinión determinarán su continuidad. Aún tiene contrato un año más, pero la duda está ahí sobre su permanencia en el club. También si éste fue el último encuentro de la segunda etapa de Cristiano Ronaldo en el Teatro de los Sueños con uno de los equipos de su vida, del que salió rumbo al Real Madrid para ser uno de los mejores del mundo y de la historia y al que volvió el pasado verano desde el Juventus.

Su primer gol no fue válido. Por unos milímetros. Al borde del descanso, cuando recibió un pase de Juan Mata, titular por primera vez en todo este curso en la Premier cuando la competición ya agota sus jornadas (al United nada más le restan dos encuentros), y remachó entonces el 2-0 de su equipo que finalmente no lo fue…

Hasta la hora de partido, cuando, entonces sí, a través de un penalti, anotó su vigésimo cuarta diana de la campaña. La pena máxima se la creó él mismo, entre su potencia, su inteligencia, su astucia y la inocencia de su marcador. Y la transformó también él mismo, con un derechazo que engañó completamente al portero internacional español David Raya, que había temido antes el 2-0, como en otra acción de Bruno Fernandes.

Mucho antes, el centrocampista portugués había encarrilado el partido a toda velocidad, en el minuto 9, cuando el ataque del United, siempre a un ritmo superior, desbordó a la defensa del Brentford, con la aparición hasta la línea de fondo de Anthony Elanga y el servicio adentro del área para el remate fácil, con la derecha, de Bruno Fernandes para marcar el veloz 1-0.

El equipo de Ralf Rangnick, anunciado ya como próximo seleccionador austríaco paralelamente a la asesoría que mantendrá en el club británico, se había sentido ganador antes y aún más después, aunque, entre medias, Christian Eriksen, primero, e Ivan Toney, después, hubieran probado los reflejos de David de Gea, sobre todo éste último, con una parada de mucho mérito con el pie que entonces sostuvo el 1-0. Fue una acción crucial.

Después llegó el citado 2-0 de Cristiano Ronaldo, a la hora de juego, y el 3-0 de Raphael Varane, en un afortunado remate tras un saque de esquina diez minutos después, para proclamar la sentencia indudable del triunfo del Manchester United, que rebusca lo imposible, la clasificación para la Liga de Campeones, mientras se consuela con la Liga Europa.

Ficha técnica

3 – Manchester United: De Gea; Dalot, Lindelof, Varane, Alex Telles; McTominay, Matic (Fred, m. 71); Elanga (Cavani, m. 75), Bruno Fernandes, Mata (Phil Jones, m. 75); Cristiano Ronaldo.

0 – Brentford: David Raya; Ajer, Henry, Sorensen, Jansson, Roerslev; Janelt (Dasilva, m. 71), Norgaard (Jensen, m. 71), Eriksen; Toney, Mbeumo (Wissa, m. 75).

Goles: 1-0, m. 9: Bruno Fernandes. 2-0, m. 60: Cristiano Ronaldo, de penalti. 3-0, m. 72: Varane.

Árbitro: Chris Kavanagh. Amonestó a Matic (m. 53).

Incidencias: partido correspondiente a la trigésimo quinta jornada de la Liga inglesa, disputado en Old Trafford ante unos 74.000 espectadores.

EFE