Unidad de diálisis en Valencia se convirtió en un sauna porque el aire acondicionado se “echó tres…”

Unidad de diálisis en Valencia se convirtió en un sauna porque el aire acondicionado se “echó tres…”

 

 

 





Personas con enfermedades renales que reciben atención en la Unidad de Diálisis Valencia Sur, del estado Carabobo, denunciaron este jueves 5 de mayo que desde hace un mes y medio no funciona el aire acondicionado.

Corresponsalía lapatilla.com

José Luis D’Alessandro, paciente renal, explicó que al no tener aire acondicionado, los pacientes están expuestos a mayores riesgos por la proliferación de bacterias.

Ellos no lo han visto como una grave emergencia, donde las bacterias y los patógenos nos pueden llevar a contaminación de catéter y enfermedades y puede ser peor“, alertó.

Indicó que la problemática afecta a más de 120 personas que reciben terapia sustitutiva renal semanalmente en este centro de diálisis.

Detalló que la unidad cuenta con tres aires acondicionados, de los cuales dos están fuera de servicio desde hace meses y el único que se mantenía operativo dejó de funcionar hace más de un mes.

Las personas en salud especial renal llegan con ventilador en mano al centro de diálisis. Sin embargo, salen descompensados por las altas temperaturas a las que se someten durante las cuatro horas de terapia.

Nos dializamos en un sauna. Eso es un sauna allá adentro, ahí salen las personas con la tensión alta y tensión baja. También hay muchas moscas e insectos“, expresó José Salazar, paciente renal.

Los pacientes de la Unidad de Diálisis Valencia Sur, dependiente del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), hicieron un llamado a las autoridades a atender la problemática rápidamente. “Estamos esperando por un técnico que no nos han mandado, también estamos buscando repararlo por nosotros mismos”, dijo D’ Alessandro.

Por otra parte, D’ Alessandro precisó que de 20 máquinas de diálisis, 15 están operativas.

Los voceros manifestaron que las instalaciones y equipos se encuentran deteriorados, sumado al déficit de personal de enfermería y mantenimiento. “Las camas están deterioradas, son muy viejas, los colchones están rotos”, agregó Salazar.