Se enteró que su esposo abusaba de sus hijos y lo mató

La casa donde ocurrió el crimen, en Corbacho 1500, Lomas de Zamora

 

En 2019, Gilda Acosta Duarte mató a su marido después de descubrir que el hombre abusaba de sus hijos. Este martes, la mujer recibió una condena de 11 años de cárcel, luego de que fuera encontrada culpable con atenuantes por el crimen ocurrido en Lomas de Zamora, en Buenos Aires, Argentina. Seguirá con prisión domiciliaria, aunque ahora monitoreada con una tobillera electrónica.

Por: Clarín





El caso comenzó el 18 de febrero de 2019. Tras enterarse de episodios de violencia y abuso sexual, Duarte (50 años) golpeó en la cabeza a Alejandro Sánchez Escobar (28) y luego lo estranguló, en una casa ubicada en la localidad de Villa Rita, en Lomas de Zamora. Dos días más tarde, la mujer se acercó a un destacamento policial y confesó: “Maté a mi pareja y lo puse en un ropero con cemento”.

El debate con jurados populares comenzó el miércoles 4 de mayo y en la segunda audiencia, Acosta Duarte sufrió una descompensación mientras uno de sus hijos declaraba sobre los supuestos abusos sexuales a los que era sometido por su padre.

El jueves pasado fue hallada culpable de “homicidio mediando circunstancias extraordinarias de atenuación”. Si bien en una primera instancia había solicitado perpetua, la fiscal Marcela Dimundo pidió el jueves pasado que Duarte fuera condenada a 13 años de cárcel. La defensa, en tanto, solicitó la pena mínima: 8 años.

Finalmente, este martes la jueza Marianela Mazzola del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 6 de Lomas de Zamora leyó la sentencia. Como había solicitado la fiscalía, la mujer continuará bajo arresto domiciliario y estará monitoreada por tobillera electrónica (hasta ahora la supervisaba personal policial).

El relato de la mujer condenada en Lomas de Zamora

Antes del inicio del debate por jurados, Duarte ofreció su relato sobre lo que sucedió aquella noche del 18 de febrero de 2019. En una entrevista de TV, aseguró que el desencadenante fue haberse enterado que Sánchez Escobar había abusado sexualmente de sus dos hijos de 12 y 13 años.

“Me entero el mismo día de los dos abusos”, señaló Duarte, de nacionalidad paraguaya. Y agregó: “Actué como mamá y en ese momento me defendí de él y defendí a todos mis hijos”.

La mujer le dijo a su pareja que iba a denunciarlo y el hombre “se rió” en su “cara” y le dijo que “estaba loca”, aunque “en ningún momento” negó la acusación.

Luego, Sánchez Escobar la amenazó e intentó mantener relaciones sexuales con ella, lo que “desencadenó una discusión”.

“Empezamos a discutir por varias cosas. Forcejeamos y fue ahí que yo encontré la pesa que estaba haciendo de apoyo para la puerta y le doy un golpe en la cabeza y él me tira contra un mueble que teníamos, y bueno, no sé, saqué fuerzas de donde no tenía”, expresó la mujer, quien aseguró que no recuerda lo que ocurrió posteriormente.

Los detalles del crimen

Tras la confesión de Duarte en la comisaría, personal de Policía Científica y Bomberos se acercó a la vivienda en la calle Corbacho al 1.500, en Villa Rita. Abrió la puerta con las mismas llaves que le había entregado la mujer y descubrió en el centro de la habitación de la pareja un ropero de tres puertas tumbado en el piso y tapado con una tela.

Luego, los policías abrieron el mueble y encontraron el cadáver de Sánchez Escobar tapado con cemento y en un avanzado estado de descomposición.

Los médicos forenses de la morgue judicial de Lomas de Zamora confirmaron en la autopsia que la causa de la muerte de Sánchez Escobar, quien también era paraguayo, fue asfixia por estrangulamiento a lazo.

También detectaron que el joven presentaba unos diez golpes en el cráneo que se cree fueron los provocados por una pesa de 10 kilos y que lo dejaron atontado, circunstancia aprovechada por la asesina para poder estrangularlo sin que ofreciera mayor resistencia.